¿DOMINIO DE GRUPO O EL GRUPO ME DOMINA?

 Violeta Isabel Morales
Prof. para la Enseñanza Primaria

No hay distancia que no se pueda recorrer ni meta que no se pueda alcanzar. (Napoleón)

¡La función docente no es fácil y cuando se trata de dominar a un grupo, durante cada jornada escolar, mucho menos! La tarea realmente se torna dificultosa, y si no nos ármanos con la sabiduría de un monje tibetano, podemos convertirnos en el increíble hombre verde, pero se pude convertir, cual calabaza en carroza real, cuando ganamos como versados estrategas ante la batalla, entonces veremos y sentiremos maravillosa, además de apasionante, está  bella carrera que elegimos.

Toda lucha debe ser resistida y al igual que David enfrento a Goliat nosotros los docentes debemos enfrentar los embates, dotarnos de armas y disponer de las mejores estrategias para librar la batalla. Muñirnos de todo aquello que nos sirva para enfrentar al “enemigo” y por supuesto salir airosos es nuestra responsabilidad.

Cada periodo lectivo todos los docentes nos enfrentamos a esta batalla y el “enemigo” que cual blanca palomita o dulce caramelo nos mira y nos escudriña, puede convertirse en cualquier momento en “CHUQUI” ese muñeco aterrorizante que nos sobresaltaba en la película.

"La actitud ociosa de un ejército es su más seguro camino hacia la derrota." decía Napoleón, que fue un gran estratega, también dijo “Para triunfar es necesario, más que nada, tener sentido común” ¿Qué significa esto? Que nada se gana sin esfuerzo y nuestra carrera es un desvelo constante, que cada acto dentro de nuestro desempeño debe ir acompañado del sentido común y para ello cada vez que estemos frente a nuestro grupo debemos posicionarnos y evocar nuestros momentos como alumnos, recordar lo que nos gustaba, cuales fueron los momentos escolares más nítidos, buenos y malos, aquello que nos marcó en nuestras debilidades y fortalezas.

Si repasemos nuestros momentos como alumnos traeremos aquellos instantes que quedaron con nitidez en nuestra memoria y si meditamos con detenimiento podemos advertir la razón. ¿Qué alude esto? Que tenemos que hacer un intercambio de roles y pensar en ¿cómo me hubiese gustado a mí que me trataran dentro del ambiente áulico?, cómo me hubiese gustado aprender y cómo aprendí y cuando se me facilito ese aprendizaje?

Muchos educadores reniegan de los cambios y se frustran. El consabido “yo lo mismo aprendí” hay que descartarlo para poder hacer un frente de batalla con las armas que hoy nos rodean, y día a día van cambiando. Nosotros como docentes no podemos cerrar los ojos ante los cambios y es nuestro deber estar listos, conocedores de todo aquello que nos sirva en este momento, ante este nuevo milenio y con estos alumnos que nada tienen que ver con los del año anterior ni con los de hace una década.

Un mago se prepara, práctica, busca siempre perfeccionarse, se muñe de todo lo que pueda servir para tenernos hipnotizados y sacar cosas de la galera cuando menos lo esperamos, valiéndose de gestos, miradas, en una palabra actuando para que no perdamos un instante la atención. Un estratega militar planifica concienzudamente todos sus movimientos y prevé los del enemigo, conoce el terreno y contra quienes debe enfrentarse, luego elige y prepara las armas para la batalla,. Al igual que estos, el docente debe estar listo para actuar y dar contienda. ¿Puede hacerlo sin estar prevenido? He aquí la cuestión. Dice Aristóteles “La inteligencia consiste no sólo en el conocimiento, sino también en la destreza de aplicar los conocimientos en la práctica.”

Como un semáforo que nos muestra su luz amarilla titilante para darnos una advertencia, el problema de indisciplina que se genera constantemente dentro del espacio áulico también. Muchas veces se escucha a los docentes decir mi grupo es insoportable, entre otras cosas, pero resulta que con la docente anterior no lo era, al menos no en esa medida. O al revés, un grupo que era rotulado de indisciplinado, con la nueva docente, no lo es ¿Por qué el cambio? ¿Cuál sería la reflexión?

A lo mejor el problema que usted tiene en realidad es sólo con uno, dos o tres alumnos, existe la posibilidad de que tengan emociones que les afecten y lleven la prioridad en su atención y concentración y en realidad si bien provocan problemas, no es por falta de dominio de grupo. Pero si de antemano visualiza problemas de indisciplina generalizada, indisciplina que crea dificultad para el proceso de enseñanza y aprendizaje, como así también para la obtención de los objetivos escolares, a causa de actitudes de los alumnos, no se desespere, podrá prever maneras de evitarla. M.C.Davini nos dice que “el docente debe incluir la emoción en la enseñanza, plantear desafíos, incluir los intereses de los alumnos, apoyarlos, estimularlos.”

Estamos transitando el tercer milenio, los desafíos son cuantiosos, como también las herramientas que tenemos para salir victoriosos. Ante un escenario en que la pedagogía critica nos induce a pensar, reflexionar, argumentar, no podemos cruzarnos de brazos y dejarnos avasallar, por el contrario tomemos todo aquello que nos sirvió y al igual que un gourmet fusionemos, no descartemos los métodos que según sea el caso nos sirven para llevar a cabo nuestra tarea de enseñanza y aprendizaje. Pensemos que un cocinero o un médico no llevan a cabo su práctica sin valerse de métodos. Los métodos son puentes para obtener resultados tan buenos como aquellos que bajo otro paradigma dieron solución a nuestro quehacer áulico. Y como bien dice M:C:Davini “la teoría da pautas a la acción y la acción problematiza la teoría”

Es positivo que los alumnos expresen su desmotivación, ya que es una forma de expresar lo que sienten y darnos el alerta cual semáforo con su luz amarilla.

A través de actos de indisciplina o de una clara expresión de aburrimiento pueden estar diciendo:

- No entiendo lo que dices.

- SOS no estás tocando mis estilos de aprendizaje o mis inteligencias múltiples

- Esa manera que tienes de enseñar me aburre.
 

ARTILUGIOS PARA EL DOMINIO DE GRUPO

Siempre escuche decir “El docente tiene el deber de ser un modelo a seguir y debe orientar a sus alumnos hacia un estilo de vida que estimule en ellos un constante crecimiento”. A ello hay que agregar que no solamente en cuanto a conocimiento sino también en cuanto a un perfil que incentive en el alumno la necesidad de tener una postura que los lleve a pensar y reflexionar sobre sus actos y su futuro.

El docente debe trabajar arduamente, teniendo en cuenta cada uno de los factores importantes que pueden afectar, directa e indirectamente el proceso de enseñanza y aprendizaje, debe producir una metanoía en su profesión, enraizarse como profesional y como tal ejercer su praxis.

ASPECTOS A CONSIDERAR

Hay que tener en cuenta como es el ambiente si es cómodo o no, si es accesible a la influencia de ruidos externos, si es amplio y se pierde la audición, o la vista por la lejanía de los alumnos, o cualquier otra situación que presente el ambiente que contribuya, o por el contrario dificulte o perturbe el poder dar una clase con absoluto éxito. Este sitio debe ser ameno para el alumno, es el espacio en el que debe estar muchas horas y la motivación para que se sienta a gusto dentro pasa por la ambientación. Al igual que cualquiera de nosotros se siente a gusto en una casa ordenada, vistosa en su decoración y colores, considere que el alumno también lo ve de esa manera.

Desde el primer momento que un docente entra en contacto con sus alumnos, al igual que un actor frente al público, debe conocer de manera general el tipo de audiencia, sus edades (no olvidar de recurrir a Piaget y refrescar lo que nos dice sobre las etapas evolutivas), sus rasgos culturales, sus formas de conductas, indagar sus saberes previos, y otros aspectos importantes, que el profesor puede investigar de manera, sencilla, precavida, y preventiva desde el primer momento.

La apariencia personal

Todo educador tiene el deber de ser un modelo a seguir y debe orientar a sus alumnos hacia un estilo de vida que estimule en ellos un constante crecimiento. No solamente en cuanto a conocimiento sino también en cuanto a un perfil que incentive en el alumno la necesidad de tener una postura de honor ante las personas que le conocen.

Es parte de nuestra postura, todos aquellos aspectos visibles exteriormente, tales como comportamiento, manera de hablar, vocabulario empleado, gestos corporales, estilo de dar la clase, y muy importante también, es la apariencia personal.

Un educador que realmente quiera inspirar confianza en sus alumnos, y crear en ellos, un ejemplo de ética tanto en conducta, como en apariencia personal, es un educador integral.

Todo educador, debe conocer, la importancia de como todos los aspectos de su vida pública, influyen considerablemente en los alumnos, y todo comienza, con la primera impresión que reciben los alumnos, desde el primer momento que hacen contacto con su profesor, vale la pena acotar, que dentro del aula de clase, es el profesor, el principal protagonista, y la mayoría de las cosas que pasan dentro del aula de clase, es propiciado, por el educador, sea consciente e inconscientemente.

Por ello, es fundamental que todo educador sea consciente acerca de cada uno de estos aspectos.

La gesticulación y los malos hábitos durante la exposición de la clase

Todo educador debe estar concentrado en cada uno de los aspectos que debe cuidar, en el momento de estar frente a la audiencia, a la cual el dispone orientar y enseñar un determinado contenido; ya que hay muchas variantes que influyen directamente, en el proceso de enseñanza y aprendizaje, así como es importante la Apariencia personal, necesitamos resaltar la importancia de como transmitimos la información, en medio del desarrollo de la clase, ya que esta es una parte elemental, de cómo estamos dirigiendo la formación del alumno.

Uno de los aspectos que hay que cuidar, es el uso de ciertas formas de expresión, que pueden causar mala impresión en los alumnos, tales como:

- Exageraciones, palabras mal empleadas en el contexto de lo que se esta hablando, palabras grotescas, o de contenido vulgar, palabras mal pronunciadas, o en el caso de la muletillas, es decir palabras que se usan con demasiada frecuencia, al momento de impartir la clase, todas estas cosas, influyen considerablemente, en el alumno, ya que causan una distracción, y el alumno, puede quedar desvinculado del tema que se esta tratando en la clase, como consecuencia del uso verbal que el profesor ha empleado.

- Cuidarse en el transcurso de la clase, de hacer cualquier tipo de gestos o acciones repetidas, inadecuadas, o simplemente no congruentes con el tema, y que generen la impresión, de que esta inseguro, bien sea por no conocer bien el tema, inseguridad por el estilo de audiencia, inseguridad por no conocer las mejores herramientas para hacer que la clase sea mas eficaz, o por no contar con los recursos o ambiente adecuado.

- Cuidar el timbre de voz, que emplea, este debe ser adecuado, al espacio, a la cantidad de audiencia, y en base al dominio que requiere tener en el salón de clase.

- La mirada es de suma importancia, debe cuidar hacia donde la dirige, durante toda la exposición de la clase, no puede darse el lujo de tener una mirada que permita al alumno percibir temor en usted; no puede estar hablando con la audiencia, y permanecer con la mirada extraviada, o mirando al piso, observando a un solo grupo reducido de los presentes o a una determinada parte del salón, sino que debe transmitir solidez en su expresión, permanecer contemplando el auditorio todo el tiempo, y estar atento de observar a todos los presentes, esto estimula y a la vez obliga notoriamente, a que los alumnos intenten poner mayor atención a la clase, por otro lado le permite al docente, tener el control de todo lo que este pasando entre los alumnos, durante el transcurso de la clase, a su vez lo faculta a estar al tanto si los alumnos le están prestando atención, si están hablando, y si el tema es ameno, adecuado para su comprensión según su etapa evolutiva, si los recursos y estrategias son los adecuados y está siendo bien interpretado.

La didáctica

La calidad de formación, de conocimiento, y de dominio de estrategias y de recursos de la clase, y de todo lo que le permita mantener un absoluto dominio de la clase, es por ello, que el educador debe preparar una excelente clase, considerando el tiempo de empleo en cada una de las partes del tema, los recursos a emplear, los medios mas adecuado para proyectar la clase usando los medios visuales, audiovisuales, de tacto, y cualquier otro recurso educativo, que contribuya a una mejor comprensión del alumno.

Todos estos aspectos contribuyen a que el docente, pueda tener dominio del grupo, mientras estos aspectos estén mal organizados, el docente, tiene la inseguridad, de que pueda ser satisfecha la experiencia en el aula, y esto contribuye seriamente, en la respuesta del alumnado ante estas evidentes fallas.

Para dominar el Grupo, es necesario que el docente domine el tema, domine las estrategias y técnicas que le permitan desarrollar la clase, domine su gesticulaciones, su adecuado uso verbal, su timbre de voz, su mirada ante la audiencia, su apariencia personal, y todos estos aspectos le permitirán al docente tener un amplio dominio de la clase y por ende del grupo.

Uso de medios y recursos

Para que una clase sea excelente, es imprescindible conocer bien el adecuado uso de cada uno de los recursos y medios a emplearse durante el inicio, desarrollo y cierre de la clase.

Esos medios pueden ser: láminas, muestra de un video, audio, mapas, música, cuentos, webquest, uso del pizarrón, salidas, experimentos, o cualquier otro medio o recurso.

Para utilizar los recursos no solo se debe conocer el instrumento que se va a utilizar en cada ocasión, ya sea para transmitir el mensaje auditivo, o audio-visual, sino también debe conocer las normas que regulan el adecuado uso de ese medio o recurso, debe conocer como es el uso adecuado durante la exposición del tema, que cantidad de tiempo debe emplearse, que cantidad de contenido es inadecuado emplear, si es audio visual, debe conocer qué cantidad de información es adecuada que contenga, en qué forma debe ser estructurada como se llevará a cabo, cuando detener, que preguntar, retomar, etc (emplear estrategias similares a las que utiliza para la lectura de un cuento). Para las visuales, que tipo de dibujo, letras (fondos y color), imágenes son adecuados, hasta que distancia se le permite visibilidad, si se prepara una webquest, la misma debe ser elaborada según las características del grupo, entre otros aspectos que pueden surgir en el uso de cada uno de los diferentes medios y recursos educativos, que pueda emplear según sea el tema a desarrollar.

El docente tiene la obligación de revisar y evaluar cada uno de los recursos, antes de decidir usarlos, para ver si están en buen estado, y si cumplen con todos los requisitos indispensables, para su uso y prever el material para ser manipulado por el alumno ya que la utilización de todo material concreto por parte del alumno es primordial para la construcción de saberes.

Desarrollo de la creatividad

Uno de los aspectos más resaltantes de la experiencia de enseñanza y de aprendizaje, es la continua exposición del docente, ante posibles circunstancias imprevistas que resulten del hecho, de estar siendo expuesto ante una cantidad considerable de alumnos, diferentes unos de otros, con actitudes, personalidades, inquietudes, motivaciones, y características, distintas unos de otros, y esto contribuye notablemente, al que el docente, se sienta frecuentemente presionado, a improvisar cualquier tipo de situación, este aspecto es importante resaltar, de que cada una de estas presiones que recibe el docente, deben motivar en él, un constante uso de la creatividad.

El docente no debe considerar estas situaciones imprevistas como un obstáculo para el mejor desarrollo de la clase, sino más bien como oportunidades para ir desarrollando un incremento continuo, en cuanto a la calidad de su propia creatividad, debe ser como un mago sacando cosas de su galera.

Prevención ante posibles limitaciones

“Hombre prevenido vale por dos” dice un popular dicho y el docente debe ser prevenido desde el primer momento en que prepara la clase, de que situaciones imprevistas puedan presentarse en medio del salón, durante la clase, imprevistos de cualquier aspecto, y prepararse para estas situaciones de antemano.

Como un avezado estratega ante la batalla que tiene un plan “B”, ejecutar planes de acción para los momentos en que surjan situaciones imprevistas, bien sea provocadas o de manera espontanea, y que mediante las mismas se pueda mantener un equilibrio, y de esa manera resolver con éxito cualquier situación anormal, incomoda o circunstancia que amenace el buen desarrollo y desenvolvimiento de la clase que hayamos preparado con tanto esfuerzo. Por ejemplo, le pedimos a los niños que lleven revistas para recortar y muy pocos cumplieron, lo ideal es tener en los armarios este material, lo mismo con tijeras, gomas, etc. Hay que tomar ejemplo de las docentes de nivel inicial que tienen siempre el material con el que trabajan los niños y de esa manera no se generan dificultades ni actos de indisciplina entre los alumnos por no poseer el material de trabajo.

La teoría de Vigotsky se basa principalmente en el aprendizaje sociocultural de cada individuo y por lo tanto en el medio en el cual se desarrolla. El dice que “a través de otros, llegamos a ser nosotros mismos.” Por ello la vital importancia que cobra el docente frente a su grupo. Cuando el docente, pese a las circunstancias adversas que surgen de manera imprevista y manifiesta absoluto dominio y control de la clase, demuestra que está capacitado para ser paladín de la clase.

Conclusiones

Como docente se debe tener en cuenta que nuestra praxis es con seres humanos en formación, y así como pedimos respeto nosotros también debemos proporcionarlo y que el maltrato no solo es físico sino que también es síquico. Una forma de maltrato docente es la falta de preparación para hacer frente una clase en donde prevalezca la construcción de saberes para que se vislumbre la buena enseñanza, aquella que de provecho en todo su accionar y crecimiento, la que pueda ser utilizada una y otra vez a lo largo de su vida para la construcción de nuevos aprendizajes.

Durante mis años de docencia busqué y busco la autodisciplina del grupo a cargo, es decir que ellos perciban que debe existir la armonía, para ello apelo a la construcción de normas por parte de ellos, con reglas claras que elaboran en el aula basándose en pautas sencillas y cotidianas que no contengan el “no” por si mismo, sino que impliquen un porqué y cuál es el beneficio de su cumplimiento, esto no debe ser para que el docente esté feliz o para tener una excusa más para castigarlos, ellos deben de estar conscientes que si tanto docente como alumno hablan al mismo tiempo no puede haber una comunicación.

El aspecto afectivo, la comunicación y autocontrol, es un elemento básico para impartir una clase, la ética debe transversalizar cada uno de los temas en las diferentes áreas. Particularmente converso con mis alumnos y les digo qué me gusta recibir de ellos y por qué, solicito que sean partícipes y opinen sobre los comportamientos de sus propios compañeros, salgo del salón para hablar con los alumnos considerados "problema" para saber qué sienten, por qué actúan así, indago sobre sus aspectos familiares (por lo general la familia es un reflejo de su forma de ser y actuar) y por último busco que la manera en que imparto las clases sea variada, tomo en cuenta que si me la paso leyendo o hablando ellos tarde o temprano se aburrirían y siempre trato de recordar cómo fueron las clases que me divirtieron en mi niñez como así también cómo y cuando se divirtieron mis alumnos y cuando nos divertimos ambos.

Ser docente es un verdadero acto de amor, implica percatarse de cada uno de los aspectos que son vitales, para proyectar una imagen de liderazgo, que le permita inspirar respeto, admiración y ser un modelo a seguir, por ello es absolutamente necesario, impulsar este perfil de educador.

Es importante la seguridad que debe tener un docente al pararse frente, entre, atrás y a un lado de un grupo, el lenguaje corporal es lo primero que percata "nuestro público".

Algunas reglas de oro :

- No discuta con los alumnos, en el momento en que el docente inicia un debate de palabras es el instante en que lo perdió y los alumnos son testigos que se ha bajado a su nivel de resolución de problemas.

- No grite, ellos son más y créame generalmente van a salir ganando (me impresiona la cantidad de decibeles que pueden sacar por esa gargantita).

- Tenga paciencia, cuente hasta 10, sonría, salga del salón a tomar aire o incluso pida ayuda a un colega para salir unos instantes del aula, y no deje de hablar personalmente con ese alumno que le provocó un sentimiento de enojo y manifieste por qué está usted molesto y qué actitudes del niño no le agradan.

- Tener empatía con nuestros alumnos, generalmente nos dan pistas de cómo les gusta aprender y todo tiene un por qué, el docente debe tomar el rol de investigador para identificar lo que provoca las diversas reacciones de los estudiantes.

Posibles causas de indisciplina/desmotivación( entre otras)

-Falta de Estrategias de enseñanza y aprendizaje.

-Falta de dominio emocional.

-Escaso conocimiento de si mismo para valerse de las fortalezas y superar debilidades.

-Relación alumno-maestro en cuestión de comunicación escasa.

-Desconocimiento de estrategias de disciplina.

-Falta de seguridad en el docente por desconocimiento o poca preparación de los temas y que es percibido por los alumnos.

-Necesidades educativas de alumnos muy marcadas que el docente no toma en cuenta (Recuerde las inteligencias múltiples).

¡Variantes hay miles, soluciones también!
Para finalizar esta hermosa frase de M.T. de Calcuta

“Solo soy un instrumento, un pequeño lápiz en las manos del señor. Aun Dios me muestra su humildad, utilizando instrumentos tan débiles e imperfectos como nosotros”

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